Internet no es el cuerno de la abundancia que algunos creen. No por lo menos en términos publicitarios.
Apenas la semana pasada hablaba en este blog acerca de la red como medio publicitario. Te recordaré que el eje del post era el hecho de que un conocido había expuesto la eficacia del ciber espacio como canal de comunicación omnipotente, omnipresente y casi casi una especie de Dios. Los hechos demuestran otra faceta del www.
La encuesta que realicé y de la cuál participaron los visitantes a este blog determinó lo siguiente.
Si bien es cierto que el 80% de los encuestados ha realizado compras por Internet, también lo es el hecho de que no ha sido por una referencia publicitaria vista en la misma red. Es decir, el consumo es tan sencillo como que si busco una cosa la compro donde la encuentre.
Las empresas podrán destinar unas buenas dosis de inversión publicitaria y utilizar todos los recursos que la Internet provea. Buscadores, banners, pop ups, y demás formas de posicionamiento a lo largo de la navegación. Los datos son contundentes: el 80% de quienes respondieron mi encuesta nunca se ha redirigido a un anuncio o pop up aparecido en la red.
La verdad es que quienes respondieron el ejercicio planteado tienen un escepticismo particular por los anuncios publicitarios. El 80% de los encuestados ha realizado alguna compra por Internet, pero de ellos el 75% nunca se ha visto influido por los anuncios en el mencionado medio de comunicación.
¿Qué pasa, entonces? Indudablemente la red es un escaparate importante para una forma de comercio. Se tienen perfectamente detectados los nichos que representan un buen negocio para el B2B. La Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI) realizó el Estudio de Comercio Electrónico 2008, en el cuál se consigna que durante 2007 el importe de ventas a través del comercio electrónico ascendió a 955 millones de dólares con un incremento real equivalente al 78% contra el año anterior 2006.
En el mismo estudio se estimaba que las ventas para el 2008 podrían alcanzar los 1,621 millones de dólares. ¿Jugosa la cantidad, cierto? Sin embargo representa, en promedio, tan sólo el 7% de las ventas totales para las 22 empresas participantes en el estudio de la AMIPCI.
¿Qué compra la gente?
Boletos de avión, reservaciones de hospedaje, boletos para espectáculos y los objetos de computación dominan la escena del comercio electrónico. El 69% del comercio estudiado por la AMIPCI es la rebanada del pastel que la industria aérea se está llevando en este canal. Mientras que la industria de la computación tiene el 8% del comercio electrónico y la industria turística se lleva un trozo equivalente al 4% del B2B estudiado en nuestro país.
¿Cómo lo hacen?
Según el listado de las empresas participantes en el estudio referido, éstas han adoptado formas de comunicación que generen lazos más próximos con sus consumidores. Las redes sociales, los foros de discusión y la provisión de información relevante e importante para los grupos objetivos es la clave que está explotando en la red. Después de todo del total de usuarios de Internet, sólo el 10% genera contenidos para la misma y el resto son downloaders de información. El camino está trazado y no es el de la publicidad tradicional.